Capítulo 10 Conclusiones

10.1 Introducción al capítulo

Este trabajo tuvo como objetivo comprender de qué forma las prácticas de hardware científico abierto contribuyen a democratizar la producción de conocimiento en la periferia. El hardware científico abierto está ganando momento a nivel global de diferentes maneras: a través de la consolidación de redes transnacionales, las emergentes recomendaciones de políticas, la atracción de nuevos colaboradores y la obtención de financiamiento tanto público como privado para el desarrollo de sus actividades. En este contexto, la propuesta intenta iluminar el costado más radical y esquivo del discurso y la práctica de GOSH: la promesa de la democratización más allá de la eficiencia, y la mirada desde los países periféricos más allá de los países centrales.

Para abordarlo se plantearon los siguientes interrogantes: ¿De qué manera GOSH se constituye como un nicho estratégico de innovación? ¿Cómo los proyectos GOSH promueven la participación de actores nuevos y más diversos en la producción de tecnología “útil” o “de impacto”? ¿En qué medida y cómo los participantes en los proyectos GOSH construyen capacidades?

Este capítulo comienza presentando el camino que llevó a la construcción del problema de investigación, para continuar con la síntesis de resultados en función de las preguntas de investigación planteadas por el trabajo. Se detallan las contribuciones teóricas, metodológicas y empíricas para luego mostrar las limitaciones del estudio. El capítulo cierra con el detalle de las implicancias que los resultados presentan para la investigación, la práctica y las políticas.

10.2 El camino hacia la pregunta de investigación

El objetivo principal de este trabajo fue explorar el potencial democratizador del HCA en la periferia; en estas primeras líneas quisiera comentar la experiencia personal que me llevó a investigar este tema en particular.

En 2015 me sumé al Centro de Investigaciones para la Transformación (CENIT-UNSAM) para trabajar en un proyecto de la red de Ciencia Abierta y Colaborativa para el Desarrollo (OCSDnet) sobre prácticas de ciencia abierta en Argentina. Mi formación en ciencias ambientales y un interés marcado por la agroecología hacían que el proyecto me resultara particularmente interesante, ya que analizaba prácticas de apertura en casos, entre otros, de iniciativas agroecológicas. Mi conocimiento sobre la ciencia abierta en ese momento era limitado; entendía que se trataba de la aplicación de la filosofía del software libre, con la que si estaba familiarizada, a la investigación académica; conocía como casi todo el mundo el proyecto SciHub.

El trabajo en ese proyecto me llevó a entender la ciencia abierta como mucho más que el uso de software libre para investigación: la comprendí, entre otros sentidos, como una práctica apropiable por actores por fuera del sistema académico, con sus propias agendas y necesidades de producción de conocimiento. Esto me llevó a presentar en 2015 un proyecto de doctorado a CONICET para continuar el trabajo en CENIT, que combinaba estos intereses bajo la pregunta de cómo las tecnologías abiertas pueden contribuir a la transición agroecológica, a través del estudio de iniciativas de hardware abierto que habíamos detectado en algunos Institutos para la Agricultura Familiar (INTA-IPAF) en Argentina.

Sin embargo, varios meses más tarde y ya con la beca otorgada, el panorama de la agricultura familiar se volvió bastante oscuro; las iniciativas que habíamos identificado estaban trabajando de forma mucho más reducida o directamente paradas. Esto obligó a abrir la mirada para detectar otros proyectos desde donde observar este cruce de prácticas de apertura y producción comunitaria de conocimiento. Influyó en este proceso de identificación mi activismo en organizaciones locales por el software libre27, con su discurso y práctica que entrelaza lo (socio)técnico con las demandas de los movimientos sociales; también mi trabajo en divulgación científica desde radios comunitarias28 y sus redes más amplias de inserción.

En este contexto, una de las entrevistas realizadas a modo exploratorio me permitió conocer el trabajo de Public Lab, y a través de esto el trabajo online de GOSH, en particular el manifiesto. A partir de esto comencé a pensar en GOSH como posible lugar desde donde estudiar la relación entre tecnologías abiertas y producción de conocimiento. Con estas ideas en mente asistí al encuentro de GOSH en Chile de 2017, sin saber bien qué esperar. Para mi sorpresa, los discursos y las prácticas de los activistas en ese evento sintetizaron los ángulos que venía trabajando: ciencia abierta, movimientos sociales, democratización de la tecnología, producción comunitaria de conocimiento. Las conversaciones con los participantes latinoamericanos que llevaron al nacimiento de la red latinoamericana de tecnologías libres (reGOSH) influyeron ampliamente en la elección del enfoque de este trabajo, que como resultado de ese encuentro se ubicó en la intersección entre el hardware científico abierto, la democratización de la producción de conocimiento y su desarrollo desde Latinoamérica.

Durante 2017 comencé a desarrollar un proyecto de ciencia comunitaria usando hardware abierto en un hacklab en Buenos Aires, donde formaba parte de la organización, en paralelo al trabajo de doctorado. Este proyecto de monitoreo ambiental incluyó además de la construcción de hardware la organización de sesiones entre investigadores, activistas y otros interesados para discutir estos temas; además me permitió experimentar de primera mano algunas de las limitaciones que estaba estudiando. Al mismo tiempo, mi participación cada vez mayor en el movimiento facilitó la creación de lazos de confianza con participantes y fundadores en el norte global, que me permitieron acceder a nuevas perspectivas y testimonios.

Estar en contacto con la mayoría de los miembros de la red y estar al tanto de las novedades me volvió una especie de “enciclopedia informal” para los nuevos llegados a GOSH, y “servicio de noticias” para el resto de los activistas. Me pareció en ese momento que era importante que este conocimiento tácito no se perdiera, y que sirviera para acompañar el desarrollo del movimiento. Esta inquietud llevó a reforzar la escala de observación del colectivo en el trabajo de tesis, profundizando en los orígenes y dinámica del movimiento global; derivó también en que escribiera la historia de GOSH que conforma uno de los capítulos de este trabajo, y una pieza de divulgación publicada en su página web29.

El diseño de la investigación tuvo un nuevo giro en 2018, cuando apareció la oportunidad de formar parte de un programa educativo suizo que promueve el uso de hardware científico abierto para el desarrollo de proyectos hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Pude observar como en este contexto tan diferente la promesa de democratización del HCA perdía un poco de fuerza, ganando mucho más terreno el discurso en torno a las eficiencias. El cambio de locación me puso en conversación nuevamente con muchos de los activistas africanos que había conocido en Chile; me di cuenta que para ellos, como para los latinoamericanos, el ángulo de democratización también es fundamental; las barreras al trabajo también son similares. Esto despertó mi interés a partir de la posibilidad de comprender la forma que toma el HCA no sólo en Latinoamérica, sino también en África.

A partir de estos encuentros y la posibilidad de acceder a financiamiento para visitar los proyectos africanos, el diseño de la investigación tomó su forma final: explorar la contribución del hardware científico abierto a la democratización de la producción de conocimiento, a través del análisis del movimiento global y de experiencias latinoamericanas y africanas.

El marco teórico que guía este trabajo también fue modificándose para acompañar los cambios en el diseño de la investigación. El marco de transiciones que permite analizar el cambio sociotécnico se complementa con el enfoque de movimientos de innovación de base, conectando con la dimensión política. El foco en la producción socialmente útil de conocimiento, en particular en la periferia, responde al eje común de todas las discusiones entre activistas GOSH del “sur global” desde aquel primer encuentro en 2017: ¿cómo utilizar estas herramientas abiertas para producir conocimiento que nos sirva?. La combinación con la literatura de los ESCT, en particular con tradiciones feministas, responde a la necesidad de reforzar el foco en la agencia de los artefactos y su contribución a la distribución de poder, pero siempre desde las usuarias, un lente que permite observar los mecanismos de la participación y su traducción en artefactos. Evaluar estos procesos de participación e inscripción en términos de capacidades tiene como objetivo explorar las contribuciones de las prácticas a un nivel más profundo, más allá de lo artefactual.

10.3 Respondiendo las preguntas de investigación

La propuesta definitiva de trabajo consiste en un análisis cualitativo a dos escalas de observación diferentes pero articuladas: por un lado se realizó el estudio del movimiento global para comprender la lógica en la que se insertan los proyectos y su viabilidad (primera pregunta de investigación), y por otro lado se realizó un estudio de caso múltiple que explora cada iniciativa situada en su contexto, ya sea académico o comunitario, tanto en términos de participación (pregunta número dos) como de construcción de capacidades (pregunta número tres).

Esta sección presenta, a modo de síntesis, cómo los resultados obtenidos permiten responder a las preguntas de investigación.

10.3.1 Consolidación del movimiento global

P1: ¿De qué manera el hardware científico abierto se constituye como una alternativa viable de cambio del régimen de herramientas patentadas hacia la apertura?

El objeto de trabajo de GOSH es la infraestructura para la producción de conocimiento, y como tal su discurso interpela a una pluralidad de visiones y actores: ciencia abierta, justicia ambiental, justicia cognitiva, tecnologías apropiadas, pedagogías críticas, (trans)hacktivismo. Estos múltiples interlocutores aportan una diversidad de elementos que GOSH aprovecha de manera diferencial para consolidar su nicho.

El análisis de entrevistas semiestructuradas y observación participante permitió identificar que GOSH se constituye como nicho viable a partir de cuatro estrategias principales:

  • la legitimación de sus demandas a través de la incorporación de actores académicos de alto perfil;
  • la formación de identidad a partir del trabajo creativo sobre los artefactos tomado de la cultura hacker;
  • la utilización de metodologías de organización y deliberación tomadas del activismo y los movimientos sociales;
  • la transparencia como forma de legitimación tomada de la ciencia abierta.

En primer lugar, GOSH se constituye como alternativa viable de cambio a partir de la incorporación de actores académicos que “legitiman” demandas y prácticas ya presentes en diversos espacios del activismo que se consideraban hobbistas o “demasiado politizadas”. Lo hace aprovechando ventanas de oportunidad abiertas por movimientos anteriores, como el “giro participativo” en la academia que facilita la discusión sobre inclusión y participación en ciencia, o los logros del movimiento de ciencia abierta, que le brindan vocabulario e identidad (“no hay ciencia abierta sin hardware científico abierto”) y normalizan la discusión sobre ciencia y propiedad intelectual entre investigadores.

En segundo lugar, GOSH toma de la ética hacker y de los transhacktivistas la estrategia de formación de identidad basada en la creatividad y lo lúdico, para hacer dialogar a esta pluralidad de marcos conceptuales con la “excusa” de los artefactos y la motivación del aprendizaje no necesariamente productivo. Hacia afuera, la estrategia lúdica permite incorporar el mensaje y los valores importantes para la comunidad en la materialidad de los artefactos. En un contexto global predominantemente tecnocrático, producir artefactos deseables, desde la creatividad y la curiosidad pero con una lógica diferente hace que el mensaje llegue a actores nuevos, que no suelen cuestionar lo social implícito en la tecnología.

En tercer lugar, GOSH toma de la justicia ambiental y el transhacktivismo los métodos de organización que le permiten motorizar su acción colectiva: procesos de reflexión y negociación altamente facilitados para que todos tengan oportunidad de expresarse, elaboración y síntesis de esta información, toma de decisiones. Generalmente estos procesos se disparan en los eventos globales, y continúan de forma virtual. Estos métodos permiten aprovechar y articular las tensiones entre las visiones plurales del movimiento para construir mensajes representativos; por otro lado generan un riesgo de agotamiento en los participantes comunitarios si no se redistribuye la carga de las tareas de organización. La decisión de fortalecer las redes y encuentros regionales en lugar de realizar un encuentro global responde en parte a este factor, y al rápido crecimiento en número de participantes que vuelve más difícil la aplicación de estas metodologías.

En cuarto lugar, GOSH toma de la ciencia abierta la transparencia y la práctica de la colaboración. El proceso de deliberación, elaboración y consenso es transparente, lo que permite legitimar la toma de decisiones y hacer circular la información. Por ejemplo, a excepción del manifiesto que fue el primer documento producido, todas las instancias de decisión se abren durante un período a la colaboración online cuyas contribuciones se incorporan a la toma de decisiones. Esto facilita además la incorporación de nuevos participantes, que tienen acceso desde el principio a toda la información.

La pluralidad, entonces, le permite a GOSH formar identidad y articular su visión con claridad y representatividad. Pero también lo habilita a comunicar esa visión a través de redes amplias, con actores que “traducen” el mensaje de GOSH según los espacios que ocupan y los interlocutores que los escuchan, ya sea en la ciencia comunitaria o los hackerspaces, la academia, la educación informal o el mundo del arte. Contar con estos nodos además le aporta recursos de diferente naturaleza: expertise técnico, expertise organizativo, credenciales, vocabulario, acceso a espacios, a financiamiento, prensa a través de participantes de alto perfil académico o de la organización civil, contactos con fabricantes de hardware que auspician materiales, entre los más significativos.

En la periferia, GOSH se consolida a través de intercambios frecuentes entre participantes de alto perfil en el centro y activistas en Latinoamérica o África. En general, el formato de estos intercambios entre intermediarios clave es el taller o la participación en eventos regionales. En estas interacciones se intercambia expertise técnico pero también modalidades de trabajo, como los talleres de armado de microscopios en Chile y Argentina con participantes de Alemania. Otra modalidad relacionada a los eventos es la participación de miembros de alto perfil académico que asisten por ejemplo a AfricaOSH. Estas participaciones permiten desarrollar o afianzar colaboraciones en la región, de alta visibilidad en circuitos dentro y fuera de la academia. Las redes regionales cuentan con autonomía para desarrollar sus propias agendas, pero existen intercambios frecuentes entre estas redes y los participantes en el norte global, en particular en AfricaOSH.

A lo largo de los sucesivos encuentros, la dinámica de decisión colectiva y sistematización de las lecciones aprendidas permitió a GOSH adaptar sus estrategias. La decisión de salir de Europa después del primer evento en CERN se tomó luego de una autoevaluación donde los participantes señalaron la falta de voces de otras latitudes. La realización del último evento global en China respondió a la inquietud expresada en Chile por parte de varios participantes sobre cómo conectar con la industria para profesionalizar los diseños. La descentralización de las actividades responde al agotamiento expresado por parte de los miembros clave del movimiento a cargo de la organización, y a la imposibilidad de organizar un único evento de las características de GOSH con más de cien personas.

El análisis muestra que GOSH está consolidado como movimiento capaz de influir en el régimen patentado de producción de herramientas científicas; las tensiones hacia el interior de GOSH se muestran productivas en tanto puedan articularse en función de objetivos comunes. En este sentido, las lecciones de otros movimientos plurales muestran que éstos corren riesgos de fragmentación, en particular a partir de la interacción con la institucionalidad. Si las prácticas y narrativas que se perciben como menos amenazantes del status quo son adoptadas y se dejan de lado aquellas más transformadoras, el movimiento puede fragmentarse generando un nuevo nicho de innovación, más radical. Algunos indicios alertan sobre este riesgo, por ejemplo la aparición de recomendaciones de políticas que solo enfatizan el aspecto de eficiencia del hardware científico abierto. La virtualidad obligada durante la pandemia de COVID-19 también resultó influyente en este sentido, ya que aquellas voces que más se visibilizan en el movimiento son aquellas que cuentan con infraestructuras de soporte, en su mayoría, desde la academia. Ante esta situación, el rol que tome la política pública resulta clave. Una posición que refuerce y promueva solo los discursos o prácticas más “digeribles” puede favorecer la fragmentación.

10.3.2 Mayor participación y más diversa

P2: ¿Cómo los proyectos GOSH promueven la participación de nuevos y más diversos actores en la producción de conocimiento y/o tecnologías “útiles” o “de impacto”?

En primer lugar, el análisis de proyectos GOSH en países de Latinoamérica y África, tanto dentro como fuera de la academia, mostró que las prácticas de hardware científico abierto permiten incorporar nuevos actores en los procesos de producción de conocimiento y tecnologías. Los modos de la participación varían según los objetivos del proyecto y no según el contexto académico o comunitario: si se trata de un proyecto con foco en abrir la fabricación en sí misma, los nuevos actores se incorporan en un rol fluido, usuaria-desarrolladora. Si el foco del proyecto está en el producto final, los nuevos actores se incorporan en un esquema de división del trabajo a través de las etapas de fabricación: pueden tomar el rol de nuevas usuarias, o de desarrolladoras o participar como fabricantes.

En segundo lugar, en los proyectos estudiados la diversidad tanto de saberes como de género de los participantes está principalmente determinada por los espacios físicos donde se desarrollan las tareas, no por la complejidad de los artefactos que intentan producir. En términos de diversidad de género, en los casos comunitarios las mujeres ocupan roles clave que aportan expertise contextual para la construcción del problema a solucionar o investigar; en los casos académicos las mujeres sólo participan como usuarias. Incluso desde este lugar, aportan saberes altamente contextualizados que contribuyen a la construcción de utilidad de los artefactos. En términos de diversidad de saberes, los espacios juegan un rol fundamental. Cuando los proyectos se desarrollan en espacios fuera de la academia, la proporción de participantes sin educación formal aumenta gracias a dos factores: el alcance de redes territoriales preexistentes de estos espacios, como por ejemplo centros vecinales, y la apertura a la participación esporádica de los vecinos, más flexible que en espacios institucionales. En los casos académicos donde se observa que los investigadores “salen” de la universidad, los contactos son facilitados por la misma institución de trabajo, que por su misión (ambos proyectos académicos trabajan en salud) conectan con entidades públicas y comunidades que sufren de enfermedades endémicas.

En tercer lugar, se pudo observar que contar con una mayor diversidad de colaboradores no implica que estos participen de todas las etapas de la producción de conocimiento/tecnologías. Algunos proyectos priorizan el beneficio directo que la comunidad puede obtener a partir de contar con un artefacto funcional, frente al potencial beneficio a largo plazo de la participación de “todos en todo”; esto sucede en particular cuando el objetivo que se trabaja es urgente, como la seguridad alimentaria.

En cuarto lugar, aunque todos los proyectos cuentan con la publicación de documentación online, no todos hacen uso del espacio virtual de la misma manera. Aquellos proyectos que logran construir una buena documentación lo hacen como reflejo de la intensidad del proceso de formación de pares, producto de la distancia entre los saberes de los colaboradores. Este esfuerzo se capitaliza con la llegada de nuevos colaboradores virtuales, esporádicos, generalmente altamente especializados. Grupos de trabajo más homogéneos, por ejemplo equipos interdisciplinarios, necesitan realizar el esfuerzo de imaginar quién es el público que puede reutilizar el proyecto, lo que suele derivar en documentación incompleta, altamente técnica o solo en inglés. En términos de licencias, todos los proyectos utilizan alguna variante de licencia copyleft, reflejando la intención de evitar la apropiación privativa de los desarrollos. Sin embargo, la “cuestión de las licencias” no aparece como relevante ni ocasiona tensiones en ninguno de los proyectos, excepto en Open Flexure. Esto podría indicar que las licencias ganan un rol más crítico a medida que los proyectos crecen e intentan profesionalizar la producción.

¿De qué forma estas estrategias de participación se materializan en mejores artefactos, “más útiles”? En todos los casos, el desarrollo y fabricación de herramientas científicas abiertas se hace a través de estrategias colaborativas de trabajo iterativo, modular y orientado a la usuaria, que facilitan la circulación de información entre actores. Las “hipótesis” que los desarrolladores construyen de forma modular se materializan en prototipos que se prueban con las usuarias en ciclos iterativos, originando mejores diseños con el correr del tiempo; el uso de licencias abiertas garantiza que la información fluya a través de las etapas sin fricciones. Esto resulta, por ejemplo, en listas de materiales que son conseguibles a nivel local y aptas al contexto de uso, adaptación de las funcionalidades a las capacidades de fabricación disponibles, adaptación de las interfaces según las características particulares de quien las usa, o en usuarias que sugieren nuevas funcionalidades que responden a sus propias necesidades. Además, esto hace que los artefactos no alcancen nunca una versión definitiva; existen múltiples versiones que coexisten y se adaptan mejor a diferentes usos.

10.3.3 Construcción de capacidades

P3: ¿En qué medida y cómo los participantes en los proyectos GOSH construyen capacidades?

En la academia, el estudio de casos permitió observar que el desarrollo de herramientas abiertas permitió a jóvenes investigadores y estudiantes navegar exitosamente obstáculos institucionales (presión para la comercialización, escaso apoyo dada la internacionalización de las agendas) en el desarrollo de nuevas hipótesis o metodologías. Adicionalmente, la visibilidad de los proyectos derivó en beneficios para las carreras académicas de los jóvenes investigadores, como el establecimiento de laboratorios propios.

Siguiendo con los casos académicos, la capacidad de producir herramientas de calidad es identificada como muy relevante para los investigadores, observándose una tendencia a la terciarización de la fabricación en espacios locales que condice con la tendencia global. En Open Flexure, caso con mayor recorrido, los investigadores se encuentran diseñando pruebas de calidad que los makerspaces u otros espacios comunitarios de fabricación pueden implementar a fin de garantizar la calidad del producto. Este modelo de fabricación distribuido de herramientas científicas abiertas a bajos volúmenes y altos estándares de calidad reduce los costos de fabricación dramáticamente, como puede observarse en otras iniciativas a nivel global (Hill et al. 2019; Parker y Novak 2020b). Este modelo también se puede encontrar en la región: un ejemplo es la compañía TECSCI30, spin-off del Instituto de Nanosistemas de la Universidad Nacional de San Martín (Argentina); otro ejemplo se puede encontrar en Scintia31, una startup mexicana que produce y comercializa herramientas para biología sintética tanto para investigación como para educación.

La capacidad de producir y reparar artefactos personalizables de manera autónoma es la que motoriza todos los proyectos. En todos los casos los artefactos fueron fabricados con materiales disponibles localmente, en los casos académicos utilizando impresión 3D, metodología que no se observa en casos comunitarios. Los componentes genéricos se consiguen en negocios locales, los componentes electrónicos son importados pero accesibles, principalmente desde China. La reparabilidad fue observada en la totalidad de los casos, y se vuelve relevante ya que existen preocupaciones sobre la tasa de fallas de algunos de los componentes importados. Los casos africanos mostraron que la capacidad de producción y reparación locales representa además una fuente de ingresos y estrategia de sostenibilidad para los makerspaces, que comercializan los artefactos producidos y ofrecen servicio técnico principalmente a universidades.

En todos los casos, la capacidad de construir un lenguaje común que permita comunicar actores diversos fue lograda gracias a la facilitación de roles académico-activistas. La característica principal de estos roles es que pueden dominar tanto el lenguaje técnico como el lenguaje de los no expertos, funcionando como puente. El tipo de diálogo que facilitan cambia de acuerdo al objetivo del proyecto: aquellos proyectos “de producto” generan diálogos de tipo interdisciplinario; en cambio Vuela, único caso orientado “a proceso” genera diálogos entre participantes con diferente formación y hasta diferente idioma. Estos diálogos toman forma, principalmente, de instancias de formación de pares o de pruebas y capacitaciones con usuarias donde se obtiene devolución sobre la performance. Excepto en el caso de Gorgas, donde las usuarias eran también sujetos de la investigación, en el resto de los casos las usuarias fueron capaces de ensamblar y reparar los artefactos.

Los participantes buscan a través de sus prácticas construir la “utilidad” que asumen lejana de la producción de ciencia y tecnología en la periferia. Para alcanzarla, la estrategia omnipresente es el diálogo entre las diferentes etapas de diseño, fabricacion y uso, tanto entre desarrolladoras y fabricantes como entre fabricantes y usuarias, e indirectamente entre desarrolladoras y usuarias. Los casos académicos se diferencian de los comunitarios en que los primeros tienden a desarrollar sus propios diseños, mientras que los segundos adaptan diseños probados como útiles en otros contextos y trabajan sobre su adaptación.

La capacidad de producir tecnologías y conocimientos socialmente útiles en cada contexto se observa en todos los proyectos de forma diferente de acuerdo a sus objetivos. La capacidad de diálogo se materializa en la construcción de problemas de conocimiento que reflejan más fielmente los problemas sociales que se pretenden abordar:

  • El trabajo de Gorgas, donde fue clave el aporte de las comunidades indígenas, generó conocimiento que permitió incorporar la movilidad humana como eje de análisis en el Plan Malaria Cero que lleva adelante el Ministerio de Salud peruano
  • Open Flexure, a partir de interactuar con las usuarias en el Ifakara Health Institute, comprendieron que además de la falta de equipos es la falta de personal técnico lo que demora los diagnósticos de malaria; un nuevo proyecto de OF trabaja en el desarrollo de algoritmos que permitan automatizar tareas rutinarias y liberar tiempo de los técnicos.
  • En Vuela, el diálogo construido con los vecinos y la interacción con investigadores visitantes permitieron que la comunidad construya un problema de conocimiento a partir de una situación de riesgo que los preocupa y por la cual vienen reclamando sin éxito.
  • La interacción entre ingenieros y microbiólogas en KossamTor reorientó el objetivo principal del proyecto original desde vender la incubadora a las universidades hacía la producción de yogur por parte de las mujeres de la comunidad vecina.

El análisis permite observar, además, que la participación en procesos de producción de tecnologías no se correlaciona necesariamente con la capacidad de todos los participantes de producir conocimiento científico. Sin embargo sí permite construir tecnologías y conocimientos “robustos”, que acercan la agenda científica y tecnológica a las necesidades del contexto local. En este punto la diferencia entre objetivos “de proceso” o “de producto” se vuelve relevante, ya que bajo los parámetros de la propia comunidad de hardware científico abierto las iniciativas de primer tipo pueden leerse erróneamente como un fracaso. Observar la construcción de capacidades permite ver que estas iniciativas bajan las barreras del proceso de fabricación, con el objetivo de incluir actores marginalizados en la conversación y fabricación de tecnologías.

10.3.4 Hardware científico abierto y democratización

Finalmente, ¿de qué forma las prácticas de hardware científico abierto contribuyen a democratizar la producción de conocimiento en la periferia? El análisis del colectivo muestra que tiene el potencial de influir sobre el modelo patentado que rige hoy la producción de las herramientas de la ciencia. Lo hace, entre otras cosas, aprovechando las tensiones entre una diversidad de actores y visiones que confluyen en la demanda de apertura. Estas mismas tensiones podrían fragmentar el movimiento si ante la aproximación de la institucionalidad, no se articulan nuevamente todas las visiones.

Los estudios de caso muestran que en la periferia las iniciativas de hardware científico abierto están lideradas por roles académico-activistas, tanto desde adentro como desde afuera de la academia, que generan instancias de diálogo a veces interdisciplinario y otras inter-epistémico, incorporando más y más diversos actores en la producción de tecnologías y conocimiento. Estas instancias de diálogo habilitadas por la apertura se materializan en la fabricación de artefactos y conocimiento robustos, altamente contextualizados; el rol de los espacios físicos es fundamental en la determinación de quiénes participan de la conversación. Estas tecnologías desde el diálogo son producto y función de esos intercambios entre usuarias, fabricantes y desasrrolladores; continúan modificándose mientras el diálogo exista. Sus diseños reflejan la configuración de espacios, usuarias y necesidades de cada contexto en particular.

El análisis de los casos permite observar también que no existe una fórmula exitosa para desarrollar proyectos: los modos de participación dependen de los objetivos, que en algunos casos responden a la necesidad de solucionar problemas, y en otros apuntan a la inclusión a través de la participación de actores marginalizados en sus comunidades. Esta tesis argumenta que ambos tipos de proyectos aportan al proceso de “democratización” de forma diferente, ya que los modos de la participación son distintos y los resultados son observables en distintas escalas de tiempo.

10.4 Contribuciones del estudio

10.4.1 Contribución teórica

Este trabajo utiliza el marco teórico de transiciones y movimientos de innovación de base para estudiar las transiciones sociotécnicas hacia sistemas de producción de conocimiento más democráticos. Como tal, la contribución teórica de este trabajo está en la triangulación de conceptos que refuerzan el análisis de la diversidad, el poder y la agencia artefactual en las transiciones hacia la democratización.

Dado que el hardware científico abierto justamente abre las etapas de diseño y fabricación, requiere de un marco que permita explorar cómo las visiones diferentes de la tecnología pueden inscribirse en los artefactos, y de qué forma estos a su vez determinan quiénes y cómo pueden usarlos (Akrich 1992). Es por ello que atendiendo a la larga tradición de estudios feministas de la tecnología se utiliza el lente de Design Justice, que habla en el idioma de quienes diseñan y fabrican, para explorar quiénes participan en qué etapas del diseño y cómo los artefactos “ejercen poder” a partir de habilitar ciertos usos a ciertas usuarias en el proceso de construir tecnologías. Los conceptos de domesticación de la tecnología, adicionalmente, permiten analizar la participación de las usuarias en términos de trabajo cognitivo, práctico y de sentido; de esta forma se iluminan los mecanismos de la participación.

Esta incorporación tiene como objetivo poder observar quiénes (y quiénes no) son los actores que toman un rol activo, capaz de inscribir sentido en los artefactos, y qué esfuerzos realizan en el proceso. Por otra parte, los estudios feministas de la tecnología están llamativamente ausentes cuando se observan las teorías más frecuentemente utilizadas para abordar el cambio sociotécnico (Sovacool y Hess 2017). Su inclusión en este trabajo también intenta revalorizar el aporte de su análisis situado e interseccional al estudio de las transiciones sociotécnicas.

10.4.2 Contribuciones metodológicas

Este trabajo utilizó como plataforma para experimentar con la aplicación de prácticas de ciencia abierta a una investigación cualitativa. Las prácticas más difundidas de ciencia abierta son mayoritariamente utilizadas en disciplinas “duras” o que utilizan metodologías cuantitativas. Esta tesis presenta una contribución en este sentido desde las ciencias sociales y para un proyecto de mediano plazo como es una tesis doctoral. Creo que esto constituye una contribución que me gustaría sistematizar en este apartado detallando las herramientas utilizadas, los beneficios asociados y los obstáculos.

10.4.2.1 Herramientas utilizadas

Al inicio de esta tesis se creó un repositorio en GitHub32 asociado a una página web33 para documentar los avances del trabajo; contar con un correo electrónico asociado a una institución educativa permite acceder a las funcionalidades de la plataforma de forma gratuita. En este repositorio se publicaron, a medida que se elaboraban, todas las notas de campo y escritos preliminares anonimizados, planes de trabajo, protocolos para entrevistas y tratamiento de datos y análisis preliminares. Los materiales no publicados en este repositorio incluyen las transcripciones de entrevistas y los nombres de los entrevistados, almacenados en una computadora de uso personal.

La ausencia de convenios en el ámbito de la universidad para uso de software de análisis cualitativo asistido por computadora (CAQDAS) hace que sean inaccesibles; a modo ilustrativo una licencia estudiantil para uso de ATLAS.ti cuesta 50 dólares por seis meses y 100 dólares por dos años, una vez demostrada la afiliación institucional. La etapa de análisis se realizó con software de código abierto; la codificación del material se hizo utilizando el software taguette34. En pos de poder visualizar relaciones entre códigos, se probó el uso de RQDA35, paquete abierto y simplificado de funcionalidades que poseen programas privativos no disponibles para sistemas operativos Linux, como ATLAS.ti o nVIVO.

10.4.2.2 Oportunidades

El uso de herramientas abiertas de documentación reportó beneficios directos e indirectos. Los beneficios directos incluyen la posibilidad de trabajar desde múltiples ubicaciones y equipos sin dejar de contar con un control de versiones consistente, disponible sin conexión y en diferentes formatos (.txt, .md, .tex); y la posibilidad de gestionar el trabajo en la misma plataforma, gracias a herramientas de gestión de proyectos incluidas en GitHub (paneles kanban, seguimiento de incidencias automatizado). Los beneficios indirectos incluyen la posibilidad de contar con una página web actualizada en tiempo real que funcionó como herramienta de comunicación/presentación ante entrevistados y personas interesadas; la mayor visibilidad del trabajo, que permitió conectar con otros investigadores en la temática y acceder a recomendaciones de lecturas y metodologías; pero principalmente la confianza por parte de los activistas, que en todo momento accedieron al plan de trabajo y sus avances. En términos de divulgación de resultados, publicar un preprint con avances del trabajo permitió ganar visibilidad en un contexto de publicaciones con referato que demoran un promedio de 6 meses para la revisión. Esta visibilidad se materializó, por ejemplo, en invitaciones a discusiones de políticas y consulta de expertos.

10.4.2.3 Barreras

Las herramientas de documentación abierta presentan una curva de aprendizaje que demanda una inversión inicial de tiempo y esfuerzo por parte del investigador, es necesario dominar el inglés para usarla y no es conveniente para el almacenamiento de datos que no sean texto, como imágenes o videos. Existen otras barreras no relacionadas con la herramienta per se, como por ejemplo que quienes desean comentar sobre los textos deben saber usar la plataforma; por lo tanto los supervisores también deben capacitarse, caso contrario se comienzan a duplicar los textos en múltiples formatos. Otra de las barreras es la propia duda ante la transparencia “pre resultados” o antes de la publicación. A modo personal, documentar públicamente cada paso de la investigación me permitió tener una conciencia mayor sobre la información que se iba generando, y de control sobre los avances. Durante el análisis, la etapa de visualización de relaciones resultó muy poco útil; RQDA es un software poco actualizado y de interfaz extremadamente rústica. Más allá de la falta de usabilidad, posee problemas de funcionamiento que entorpecieron el trabajo y pusieron en riesgo horas de análisis. Algunas relaciones básicas, como nube de códigos o frecuencia de palabras pudieron extraerse utilizando scripts propios escritos en R36, sin embargo para niveles de análisis más avanzados esto requiere de mayor tiempo y dedicación.

A modo de síntesis, las prácticas de ciencia abierta en investigación cualitativa demandan de inversión de tiempo de aprendizaje, las herramientas no están diseñadas específicamente para la disciplina por lo que algunas veces el trabajo se dificulta; sin embargo personalmente considero que los beneficios exceden ampliamente los esfuerzos de uso. En este sentido, una publicación reciente de Okune (2020) documenta el uso de la plataforma de código abierto PECE para el archivo colaborativo, “vivo” de datos cualitativos obtenidos en investigación etnográfica. Este tipo de plataformas pueden reducir la curva de aprendizaje y resultar útiles en la formación de comunidades temáticas alrededor de temas de investigación, que aumenten todavía más la visibilidad.

10.4.3 Contribuciones empíricas

10.4.3.1 Movimiento GOSH

Los resultados de este trabajo contribuyen en primer lugar a la comprensión de la dinámica colectiva de GOSH como movimiento de innovación de base. El análisis permitió identificar de qué forma GOSH articula su pluralidad y construye una identidad y estrategias propias a partir de elementos tomados de los diversos marcos conceptuales que informan la acción colectiva. Los elementos identificados incluyen las prácticas de transparencia y colaboración tomadas de la ciencia abierta, los métodos de organización y deliberación que motorizan la acción colectiva tomados del activismo, la creatividad y lo lúdico para la construcción de identidad y artefactos con nuevos sentidos tomado de la cultura hacker, la legitimación de las demandas a través de incorporar actores académicos de alto perfil. La pluralidad de actores también habilita la llegada del mensaje a espacios diversos y con discursos apropiados, y la movilización de recursos de tipo material como no material. Se pudieron identificar además las relaciones entre el norte y sur globales dentro del movimiento, principalmente a través de intermediarios clave que circulan conocimiento tanto organizativo como técnico. Por otro lado, se hizo visible que existen procesos de aprendizaje secundario que permiten a GOSH adaptar su acción de acuerdo al entorno y las necesidades de su pluralidad.

El análisis en clave de movimientos de innovación de base permitió una mirada contextualizada de la emergencia de GOSH, que derivó en la escritura y publicación de la historia del movimiento desde las primeras conversaciones en 2014 hasta hoy. Por otro lado, a partir de esos conocimientos y la experiencia de movimientos históricos con similares características, el estudio contribuye a comprender de qué forma las tensiones existentes, hoy aprovechadas por procesos de articulación, pueden resultar en fragmentación del movimiento ante la interacción con las instituciones.

10.4.3.2 Hardware científico abierto en el sur global

A partir de este trabajo se constriyó una base de datos geográfica sobre proyectos GOSH que releva nodos de la red en contextos académicos y comunitarios, y se encuentra disponible en línea de forma abierta37.

El estudio de casos presentado en esta tesis contribuye a la comprensión de la forma que toma el movimiento del hardware científico abierto en Latinoamérica y África, no explorado anteriormente. El trabajo permite observar la dinámica de producción de conocimiento y tecnología socialmente útiles en proyectos de HCA del sur global, a partir de la contextualización de problemas de conocimiento durante las etapas de desarrollo, fabricación y uso de herramientas para la ciencia.

10.4.3.3 Participación en hardware científico abierto

En términos de diversidad este estudio muestra los patrones de género en proyectos de HCA, y en particular el rol clave de las mujeres en la contextualización del conocimiento y la tecnología. El rol de los espacios y su importancia para la colaboración en HCA están documentados; este trabajo contribuye empíricamente al identificar una relación directa entre espacios físicos de participación fuera de la academia y máxima diversidad de participantes en proyectos de HCA.

Por otro lado se describe la relación entre las dinámicas en los espacios offline y espacios online en proyectos de hardware científico abierto. Coincidiendo con Bonvoisin, Mies, et al. (2017a) y Stirling y Bowman (2020), se observa que aquellos proyectos con mejor documentación online son los que documentan procesos en lugar de publicar solo resultados. Este trabajo permite observar adicionalmente que es el desarrollo de procesos intensivos de formación de pares en el espacio offline el que produce la documentación de calidad como herramienta de diálogo, y que luego este material se publica online. Dicho de otra manera, proyectos donde la distancia epistemológica entre colaboradores es menor producen documentación menos inclusiva y en ocasiones incompleta, porque deben imaginar a quién le hablan.

10.4.3.4 Hardware científico abierto y capacidades

El estudio permitió explorar las capacidades valoradas por los proyectos de HCA en la periferia. Estas incluyen: la capacidad de producir conocimiento y/o tecnología socialmente útiles; autonomía para producir, modificar y reparar los artefactos; en el caso de los proyectos “de producto” la capacidad de comercializar los artefactos producidos; en el caso “de proceso” la capacidad de perder el miedo a la tecnología y participar en la producción de conocimiento; en los casos académicos la capacidad de producir artefactos de calidad.

La capacidad de generar un lenguaje común se observó en todos los proyectos de HCA en la periferia; capacidad que habilita el diálogo entre colaboradores diversos y que se refleja en la construcción de artefactos y conocimiento a través de los mecanismos descritos anteriormente.

10.4.3.5 Hardware científico abierto y “diseño justo”

En relación a las tecnologías este trabajo muestra que el HCA en la periferia funciona como mecanismo para la producción de diseños más “justos” en términos de Design Justice: tecnologías que redistribuyen el poder que el diseño otorga a las usuarias en un contexto específico. Se identificaron los trabajos prácticos, simbólicos y cognitivos que realizan los colaboradores en proyectos de HCA en la periferia, entre los que resaltan los trabajos de construcción de lenguaje común, los trabajos de formación de pares, los trabajos de selección de materiales y funcionalidades apropiadas a contexto, y los trabajos de reparación.

10.5 Limitaciones del estudio

Existen algunas limitaciones en el presente trabajo que deben tenerse en consideración al evaluar las implicancias. En particular, la exploración del potencial democratizador del HCA no pudo ser realizada en toda su extensión ya que el foco estuvo puesto en analizar cuatro casos de estudio en un horizonte de tiempo limitado, involucrando solo a una porción de los stakeholders directos en cada caso.

En primer lugar, el horizonte temporal de este trabajo no permite evaluar impactos, por lo cual el análisis sobre la construcción de capacidades es orientativo y requiere de investigaciones a largo plazo.

En segundo lugar, las propias decisiones metodológicas implican entender al análisis de las capacidades presentado como de carácter exploratorio. Existen metodologías que podrían haberse utilizado para analizar capacidades en detalle pero que hubieran requerido concentrar todo el esfuerzo de esta tesis en esa temática (O’Donovan y Smith 2020). En este trabajo se eligió priorizar la incorporación de otras dimensiones relevantes para la democratización, como por ejemplo enmarcar las actividades de los proyectos en la práctica y las narrativas del movimiento global, o analizar la relación entre las actividades de los participantes y la agencia de los artefactos producidos.

En tercer lugar, las comunidades con las que se pudo trabajar son aquellas que tuvieron un rol activo y visible en las actividades analizadas en cada proyecto, pero muy probablemente los impactos se hayan extendido hacia otros grupos a los cuales esta investigación no pudo alcanzar.

Finalmente, incluso en el marco del propio diseño de la investigación, la pandemia de COVID-19 generó barreras para alcanzar de forma presencial algunas de las comunidades para las cuales esperaba tener acceso. Se cancelaron los planes de viaje a los casos africanos, aunque se contaba con financiamiento. Esto impidió la observación participante que sí se logró para Vuela. Si bien el material necesario para el análisis pudo completarse por medios virtuales, sin duda se perdió información contextual y de procesos, que hubiera enriquecido el análisis. Tampoco se pudo interactuar directamente con las comunidades involucradas en estos casos, como sí pudo hacerse en el otro caso comunitario.

10.6 Implicancias del estudio

10.6.1 Futuras líneas de investigación

Esta tesis expande el conocimiento disponible sobre el movimiento global de hardware científico abierto, las iniciativas asociadas en América Latina y África, y en particular los mecanismos que contribuyen a la democratización de la producción de conocimiento y tecnologías. Esto abre una serie de potenciales líneas de investigación que se detallan a continuación.

A nivel de colectivo resultaría interesante contrastar las diferencias discursivas entre las redes regionales en el norte y en el sur, en particular en el contexto actual en que ganan autonomía. Esto da pie también a otra posible línea interesante de investigación, anticipada en este proyecto, que evalúe de qué forma las diferentes propuestas de incipiente política pública influyen en el grado de cohesión o fragmentación de GOSH como nicho; y el análisis de qué vías alternativas encauzan los discursos que no son incluidos o promovidos desde las políticas.

En términos de proyectos, una de las líneas más claras que abre esta investigación es la posibilidad de evaluar la construcción de capacidades especialmente en aquellas usuarias más marginalizadas del proceso de producción, a través de técnicas específicas como por ejemplo Q-method, ya utilizadas para evaluar capacidades en makerspaces (O’Donovan y Smith 2020). El análisis de las diferencias entre prácticas entre norte y sur global también es interesante en este nivel, al igual que la comparación entre proyectos “de proceso” y proyectos similares fuera de la red de GOSH, como los proyectos de extensión universitaria.

Otra de las líneas futuras que se abre está relacionada al rol de los espacios y su influencia en la construcción de capacidades y la diversidad de la participación; por ejemplo diferencias entre espacios extra-académicos como centros vecinales, cuya función no es el diseño ni producción de tecnología, y makerspaces. Los resultados sobre documentación también abren la posibilidad de explorar la correlación entre procesos de formación de pares de diferente tipo y distintas calidades de documentación.

Dentro de la academia, una de las líneas que se abren es la de desigualdad de género en proyectos de HCA y mecanismos que impiden la participación de mujeres en la toma de decisiones. Otras posibilidades incluyen estudiar de qué forma las prácticas de hardware científico abierto son disruptivas de la política del conocimiento dentro de la academia. Esta línea constituye un proyecto de postdoctorado próximo a iniciar, del que formo parte.

10.6.2 Implicancias para la práctica

Es una de las intenciones de este trabajo que las contribuciones resulten útiles a los activistas del sur global, y en alguna medida también a quienes forman parte del movimiento en el norte global.

Para el activismo, la implicancia más relevante de este trabajo es la identificación de una posible fragmentación de GOSH en un futuro próximo. En este sentido, las estrategias de formación de identidad descritas, alrededor de lo lúdico, pueden ser útiles para pensar cómo incorporar mecanismos que garanticen la escucha de las voces minoritarias en el movimiento, en un contexto de creciente demanda de organización y estructura. Por otro lado, es un llamado a la reflexión sobre las interacciones entre el movimiento y las instituciones, a fin de evitar que el discurso único y “digerible” sea la vía privilegiada de acción colectiva.

La identificación de las estrategias del movimiento global para su consolidación tiene implicancias para las redes regionales, que pueden retomarlas como lecciones aprendidas. Yendo en particular al trabajo de la red latinoamericana reGOSH, esta información puede utilizarse para desarrollar alianzas estratégicas con potenciales “usuarias” como la red iberoamericana de ciencia participativa (RICAP) o “desarrolladores” como la creciente cantidad de jóvenes investigadores que se entusiasman fabricando herramientas propias. Pero principalmente conectando con espacios y actores extra académicos, como clubes de reparadores, espacios de educación popular, espacios de arte y ciencia, makerspaces.

La identificación de las limitaciones de los criterios de éxito en proyectos de HCA llama a encontrar “métricas contextualizadas”, o lentes capaces de ver los aportes de diferentes tipos de prácticas dentro del movimiento. Considero que el enfoque desde el desarrollo humano que se mostró de forma incipiente en este trabajo puede ser útil para ese fin.

La identificación de patrones de género en los proyectos de HCA tiene implicancia directa para los proyectos, llamando a la revisión de estrategias y modos de trabajo dentro de la academia que excluyen a las mujeres de la toma de decisiones, y que en las comunidades dividen las tareas de forma diferencial. Considero que poner este problema entre las prioridades de trabajo de las redes regionales resulta de mayor importancia para acortar la distancia entre el discurso global y la práctica local; desarticular las prácticas excluyentes también va a abrir intercambios y escuchas que pueden ser útiles en sentidos no anticipados.

Otra de las implicancias de este trabajo está relacionada a las limitadas herramientas para la colaboración en HCA como uno de los cuellos de botella relevantes. Algunos equipos en Inglaterra y Estados Unidos se encuentran desarrollando software de código abierto para este fin; tener voz en este proceso es importante para las redes regionales ya que permitiría a los proyectos locales acceder a mejores herramientas.

10.6.3 Implicancias de políticas

Desde el inicio de este trabajo en 2016 hasta ahora, el contacto entre GOSH y la institucionalidad se hizo cada vez más frecuente. Como se mencionó anteriormente, una de las potenciales consecuencias de estas interacciones es la fragmentación del nicho ante políticas que refuercen solo una de las visiones dentro del movimiento.

La implicancia más fuerte para la política de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI) en este sentido es el llamado a pensar la apertura como transversal a actores dentro y fuera de la academia; las propuestas más radicales de GOSH, que a su vez son las menos visibles, tienen que tener un lugar en la mesa de discusión de políticas sobre hardware científico abierto.

En la academia, incentivos al trabajo interdisciplinario, evaluación de proyectos de HCA en términos de capacidades, capacitación de las oficinas de transferencia en uso de licencias abiertas, son algunas de las claves. Pero en particular, la promoción del HCA en otros ámbitos por fuera de la academia, la adopción de lineamientos para la documentación, la creación de repositorios con diseños “curados”, pueden abrir una vía transformadora. Algunos ejemplos concretos incluyen: la promoción del desarrollo de HCA desde los IPAF para facilitar procesos de codiseño en la agricultura familiar; el uso de HCA en las escuelas secundarias técnicas como herramienta de aprendizaje; incluir habilidades de desarrollo y uso de HCA en capacitaciones a pequeños y medianos emprendedores, promover conexiones con la industria que permitan transformar prototipos abiertos en productos, por ejemplo a través del punto de partida del proyecto CIAA. Estas líneas se están trabajando tanto desde la comunidad global GOSH como desde el movimiento regional, reGOSH.

10.7 Conclusión del capítulo

Este capítulo presentó la conclusión del trabajo de tesis, cuyo objetivo fue explorar las contribuciones del hardware científico abierto a la democratización de la producción de conocimiento en la periferia. Se realizó una síntesis del recorrido que permitió construir la pregunta de investigación, seguido del resumen de las respuestas a las tres preguntas específicas planteadas en este trabajo.

El capítulo detalló las contribuciones del trabajo en términos teóricos, metodológicos y empíricos, que incluyen la combinación del marco teórico de transiciones sociotécnicas con miradas desde los estudios feministas de la tecnología, la aplicación de metodologías de ciencia abierta a una investigación de tipo cualitativo, y contribuciones empíricas sobre el movimiento global y sus estrategias, y sobre patrones de participación, diversidad, trabajos y construcción de capacidades en los estudios de caso.

Considerando las limitaciones del estudio, el capítulo cierra con las implicancias del trabajo en términos de futuras líneas de investigación, donde se identifican temas a profundizar en términos del movimiento global y las redes regionales, las dinámicas del HCA en la academia respecto de las políticas del conocimiento, y las capacidades construidas por proyectos de HCA comunitario, entre otras. Las implicancias para la práctica muestran que el trabajo proporciona información de utilidad para los activistas que buscan expandir el HCA en la periferia, sistematizando lecciones del movimiento global, dirigiendo la atención a las estrategias probadas más útiles y alertando sobre dinámicas de poder hacia dentro del movimiento. Finalmente, las implicancias de políticas proporcionan ideas para la promoción del HCA tanto dentro como fuera del ámbito académico, mostrando el rol clave de las instituciones en el potencial transformador de la práctica de hardware científico abierto en la transición hacia sistemas de producción de conocimiento más democráticos.